Un refugio de piedra blanca frente al Mediterráneo

A pocos pasos de la Playa de Santo Tomás, se encuentra Villa Le Blanc de Gran Meliá, un modelo de hotel eficiente y responsable con el medioambiente. El hotel resplandece con una arquitectura vernácula, donde la luz inunda los espacios a través de grandes arcos. El blanco de su piedra le permite integrarse en el entorno natural de la costa sur de la isla. Esta, a su vez, se ve reflejada en el proyecto paisajístico del hotel, basado en un jardín mediterráneo que llega hasta las mismas puertas del mar.

El hotel boutique de mayor lujo de la isla, con uno de los proyectos sostenibles más ambiciosos de la cadena hotelera necesitaba una nueva imagen para su marca. Nuestro proyecto se basó en vivir, estudiar, conocer y actualizar el universo visual del hotel, tomando la propia luz mediterránea como elemento fundamental de las fotografías, mostrando sus vistas, sus atardeceres y amaneceres,  sus cocktails y desayunos, su personal y su entorno de la mano de Silvia Gil-Roldán.